Errores que cometemos en la estimulación temprana

La estimulación temprana del bebé consiste en proporcionarle al niño o niña un entorno de aprendizaje, con estímulos y retos que contribuyan a su desarrollo psicomotor. No se da en un momento puntual, sino que se trata de una etapa dilatada en el tiempo, desde sus primeros días de vida hasta, aproximadamente, los 6 años. 

La estimulación temprana necesita de dedicación y paciencia por parte de papás y mamás, además de herramientas aliadas para aprender a desenvolverse correctamente en el entorno. Ejemplo de ello son juguetes para apilar, peluches con diferentes texturas, sonajeros… Aunque la teoría es clara, en la práctica se pueden cometer errores, especialmente los papás y mamás primerizos. Hemos recopilado los más habituales para que los detectes a tiempo. 

Si nos presionamos, le presionamos

Tiramos de refranero para deciros que, aunque no nos guste, “las cosas de palacio, van despacio”. La estimulación temprana de tu hijo o hija es un aspecto fundamental para su crecimiento y nos lo tenemos que tomar con calma y sin agobios. Es importante tener en cuenta que cada bebé es un mundo y que cada uno lleva su ritmo. Solemos imponernos unos plazos y, si no se cumplen, pensamos que algo va mal y nos agobiamos. Sin embargo, esa frustración se la estamos transmitiendo a los peques. Ayúdale, anímale, pero no le fuerces. 

“Cuidado”, “eso no”, “así no”

Y muchas más órdenes en negativo que vienen condicionadas por nuestro propio miedo. Es conveniente que el niño o niña se familiarice con nuevos estímulos, herramientas y habilidades y, para ello, necesita un poquito de libertad y la posibilidad de equivocarse. La precaución es necesaria, el miedo infundado es un obstáculo para el aprendizaje. 

Sobre estimularle 

¿Te has hecho con todos los juguetes de estimulación del mercado? Pues te aconsejamos que no los utilices todos a la vez. Si lo haces podrías confundir al bebé, que no se focaliza en un objeto en concreto. Adáptate a sus tiempos y ve poco a poco. La estimulación se practica durante el juego y para ello, el niño o niña debe estar relajado, sin hambre y sin sueño.

Deja a un lado las expectativas

La rigidez no es buena consejera en estos casos, ¡olvida los calendarios y el plan de entrenamiento militar! Disfruta de los avances de tu bebé, de las cosas nuevas que descubre, de experimentar con él. Es un periodo lleno de sorpresas, también para ti.  

“Pues en la guarde todos los niños gatean”

El aprendizaje no es una carrera. Todos tenemos más o menos habilidades en según qué cosas y estamos seguros de que tu bebé también. La comparación no conduce a nada positivo. Si hay algo en el desarrollo de tu bebé que te genera dudas, puedes consultar con tu pediatra, pero, en cualquier caso, debes saber que tu hijo o hija es único e incomparable.  

Te invitamos a que descubras nuestros juguetes de estimulación temprana y vayas probando con ellos ¡nuestro juego de apilar es muy divertido para los peques! Estamos seguros de que te encantarán nuestros sonajeros blanditos con figuras de animales. Y, si tienes dudas, estaremos encantados de aconsejarte.